El pasado 15 de agosto, un grupo de residentes de las viviendas supervisadas de Can Raspalls fueron a contemplar la puesta de sol desde Vila.

Tuvieron la suerte de despedir al sol escondiéndose entre montañas y aplausos, así como de disfrutar las impresionantes vistas que tal sitio ofrece.

Al bajar, visitaron las paradas artesanas que están situadas en el puerto y probaron algunos de los productos de nuestra isla.